Las niñas dentro de mi cabeza me levantan a gritos
Cada mañana. Unas que otras quedan perdidas
En mi cuello y se empeñan en estirarlo y
Retorcerlo lo más posible. Pretenden tejer un lindo
Arreglo floral de axones y dendritas
Para su regreso a la Tierra de Fuego, donde Céfalo
Sucumbe al martilleo de sus hermanas y
Reconoce el todo por los canales de sus partes.

